LA FACTURA ELECTRONICA EN PANAMA
En el desarrollo de nuestra
actividad diaria, recibimos con frecuencia consultas sobre el avance de la
tecnología y sus aplicaciones en el campo de la administración de empresa. Hemos decidido compartir estas experiencias
con nuestra audiencia cuando estimamos que la consulta es de interés general o
nacional.
La lucha contra el fraude y
el afán de erradicar escándalos como los recientes PANAMA PAPERS han dado
origen a la modalidad de la factura electrónica. Los convenios de intercambio de información
que se vienen desarrollando entre los países, de los cuales el nuestro forma
parte, requieren de la implementación de esta factura.
Algunos clientes y amigos,
preocupados por la gestión eficiente de sus negocios, nos han estado
cuestionando sobre la implementación de la factura electrónica en Panamá y sus
posibles efectos. En esta entrega les
compartiremos algunos resultados de nuestra investigación sobre el tema y cómo
estimamos afectará las empresas y profesionales independientes del país.
Empezaremos por definir qué
es una factura electrónica: Una factura electrónica es una factura que se
expide y recibe en formato electrónico. Como
tal, es un justificante de la entrega de bienes o la prestación de servicios, expedido
o recibido en formato electrónico. Tiene
los mismos efectos legales que una factura en papel.
Es importante destacar que
la expedición de una factura electrónica está condicionada al consentimiento de
su destinatario. La factura electrónica,
por tanto, es una alternativa legal a la factura tradicional en papel.
Existen dos tipos de
facturas electrónicas: La factura electrónica con formato
estructurado y la factura electrónica con formato no estructurado. Ambas son documentos electrónicos
susceptibles de ser transmitidos mediante redes de comunicaciones electrónicas,
como Internet. La diferencia estriba en que: el de formato estructurado
facilita su tratamiento automatizado, mientras que el no estructurado no.
A continuación presentamos
algunas ventajas de la implementación de la factura electrónica:
1.
Acortar los ciclos de tramitación, incluido
el cobro;
2.
Reduce errores humanos;
3.
Elimina costos de impresión y envío postal;
4.
Facilita un acceso rápido, ágil y fácil a las
facturas almacenadas;
5.
Reduce drásticamente el espacio necesario
para su almacenamiento;
6.
Mejora el servicio al cliente; elimina el
consumo de papel y facilita su transporte, con el consiguiente efecto positivo
sobre el medio ambiente;
7.
Facilita la lucha contra el fraude.
Entre los beneficios antes
mencionados el más importante para su implementación, desde el punto de vista
del gobierno, es el punto 7.
Una vez establecido lo que
es una factura electrónica, veamos algunos aspectos de su implementación:
En primer lugar se requiere
de una legislación que regule el uso de la factura electrónica en el país. Esto significa que el ejecutivo a través del
MEF debe presentar un proyecto de ley a la Asamblea de Diputados para su revisión
y aprobación.
Vamos a suponer que se
apruebe dicha ley, la misma debe indicar la fecha de su implementación. Luego, a través de una licitación pública, se seleccionará
una empresa certificadora de firmas digitales y su respectiva asignación. Este proceso, de escogencia de una empresa
certificadora de firmas digitales, puede tomar mucho tiempo.
Ahora veamos quienes
estarían obligados al uso de
la factura electrónica:
Partiendo del punto 7 de los
beneficios del uso de la factura electrónica, se esperaría que nadie estuviera
excluido de su uso; por tratarse de una ley de carácter obligatorio. Desde este punto de vista, los profesionales
independientes como abogados, médicos, ingenieros y las profesiones liberadas
que antes estaban exentas del uso de la impresora fiscal, ahora tendrían que
utilizar las facturas electrónicas.
En cuanto a los costos:
Las
empresas y profesiones liberadas tendrían que adquirir, a través de la empresa
certificadora de firmas digitales, una firma digital;
Esto
implica que, una vez que desaparezcan
las impresoras fiscales, las cajas
registradoras fiscales, y las impresoras fiscales móviles, todos los
empresarios y profesionales independientes tendrían que adquirir un sistema de
facturación electrónica,
En
vista de que los comerciantes de pequeñas tiendas y mini-supermercados también
estarían obligados al uso de las facturas electrónicas, es posible que se
repita la historia de la revolución, confusión, histeria masiva y traumática que
se experimentó al momento de la implementación de las impresoras fiscales.
La otra
experiencia que vemos venir, para muchas empresas, es el cambio de sus sistemas
contables por uno que funciona con la factura electrónica o pagar nuevamente
por una interface de impresión de facturas electrónicas.
Igualmente vemos venir una
oleada de ALI BABAS y sus cuarenta ladrones, como lo que ocurrió con la
implementación de la impresora fiscal; cuando muchas empresas las adquirieron
de proveedores que han desaparecidos del mercado local.
En resumen: La
implementación de la factura electrónica, será otro de los eventos largamente recordados
por los profesionales independientes y las pequeñas y medianas empresas. Esta será tan traumática, confusa, histérica
y estresante en el ámbito de estas empresas, como lo fue con la llegada de las
impresoras fiscales.
Sin embargo, en esta ocasión,
existe la esperanza que la situación sea muy distinta; si se hace uso de la
experiencia pasada y se actúa con prudencia.
A pesar de la aparente complicación que podría traer este cambio hay una
luz al final del túnel.
En la actualidad existen, en
nuestro mercado de sistemas, la oferta de herramientas que ya tienen
implementada la factura electrónica. Las
mismas se pueden obtener por medio de sistemas como: BIPYMES ERP, SWITCH ERP y
otros. Estos sistemas allanarían el
camino para los empresarios prudentes de las PYMES, minimizándoles costos y
esfuerzos.
Nuestra recomendación, a este
auditorio, frente al hecho que la implementación de la factura electrónica
viene, ya sea en este gobierno o en el otro es: Buscar con anticipación, en el
mercado de sistemas para PYMES, los sistemas que ya tienen implementado la
factura electrónica, entre los sistemas señalados.